* Sobre la Tolerancia

Sobre la Tolerancia

Por Spartako

Tomado del Portal de Noticias de RadioAmlo

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Una opinión equivocada puede ser tolerada donde la razón es libre de combatirla.
Hay un límite en que la tolerancia deja de ser virtud.
Thomas Jefferson y Edmund Burke

El día 28 de septiembre a invitación de Renegada participé con algunos comentarios sobre el tema de mexicanidad que nos presentaron uno de los círculos de estudios que se trasmiten por Radio AMLO. De ahí se desprendió una series de comentario que quedaron inconclusos sobre la tolerancia, y a los cuales recibí algunos comentarios de no dejarlo sin cerrar. En una participación de ayer sábado, igualmente se cierra dicho comentario a lo cual prometí pues escribir algo y compartirlo.

Estoy convencido que la tolerancia elevada a un nicho inmerecido provoca indiferencia y anula posibilidades de interés humano mutuo: que el resto haga lo que quiera, que a mí me da lo mismo. Como efecto colateral nos manda a respetar lo que es indebido. La tolerancia, llevada al extremo, nos manda a una caída libre en la moral.

La tolerancia mal entendida nos lleva a sufrir en muchas ocasiones el síndrome del niño héroe, nos sacrificamos por causas perdidas, nos encanta que nos manipulen y si vemos que alguien le ponen un correctivo inmediatamente saltamos en su defensa aunque no sepamos por que están sucediendo las cosas. Excelentes y prestos para atacar aun a quienes consideran compañeros, sobreponiendo a la estima o a la unidad siempre en primerísimo lugar el modelo de critica de la derecha, pues según ésta atentamos contra la libertad, somos intolerantes y varios calificativos de ese calibre, propaganda preferida por la derecha que usa el miedo al desprestigio como un arma letal. Usamos así el modelo que deseamos superar.

Lo pudimos ver en los legisladores que actuaron con una “virtuosa” (yo diría degenerada) TOLERANCIA para lo que se estaba discutiendo en la cámara de diputados con el gasolinazo. ¿Por que ser tolerantes contra esos crímenes? ¿Por miedo? ¿Por quedar bien ante los que nos linchan? Así la TOLERANCIA es una moda, como expresión esta bien visto hablar de ella ensalzarla y entronizarla. Atreverse a cuestionarla te puede conducir al infierno de los improperios y te vuelves merecedor de todas las calumnias juntas, el desprestigio, aunque de manera increíble pocos sabemos de que hablamos cuando la invocamos.

«tolerar es admitir un comportamiento con el que no podemos estar de acuerdo».

«el que está en la verdad suele ser comprensivo, mientras que el que no sabe nada y además no se da cuenta que no sabe nada, con facilidad se erige a sí mismo en el creador de la verdad»

La tolerancia se relaciona de forma directa con la verdad, si no admitimos su existencia, tampoco admitimos el punto de referencia del cual hablamos de que algo se debe tolerar o no. Si no fuese así ¿entonces cuál es el parámetro para establecer si alguien es tolerante o no? ¿Con respecto a qué lo afirmamos?

En el caso de las creencias religiosas, por ejemplo, sabemos que la tolerancia es una sana costumbre: dejar que cada persona decida en su fuero interno lo que ella quiera. Y es más que eso, nos enseña a convivir y a respetar, lo que al final son acciones de amor por el prójimo. Es decir, la tolerancia tiene esa limitación, la de la ser una regla en dos direcciones.

A la verdad no se le tolera, a la verdad se le acepta o no y punto. Habrá quien la niegue o quien la afirme Dependerá de la postura que se tome frente a ella como definiremos si alguien es tolerante o no.

Así las cosas tolerar no es permitir todo ni admitir que todo va bien, es lo mas alejado de la palabra en referencia, quien se hace de la vista gorda frente a determinados sucesos, se convierte en una muestra del aire de permisidad que caracteriza a la hipócrita derecha que todo lo corroe, que todo lo manipula, es la clásica postura de valorar con mayor ahínco el no tener problemas y quedar bien con todo y con todos que rifársela por la vigencia de muchos valores.

También se que pocos se atreven a señalar lo que esta bien o lo que esta mal, por el temor, esa arma tan eficaz en estos tiempos, Esa lapidaria frase de “nada es verdad ni es mentira, sino que todo depende del color del cristal con que se mira”, inclusive en los medios oficiales se instauro un programa con ese nombre y que a sido elevado a categoría absoluta.

Así no es importante lo que miramos, si no el cristal o la ventana por la cual se mira, lo que era un medio para acercarnos a la verdad ahora se ha convertido en el canon por medio del cual se juzga lo que es correcto o incorrecto y lo que no lo es, lo asumidle y lo rechazable, la verdad y la mentira. Es el canon inatacable de la tolerancia.

Es el nuevo canon que nos imponen los nuevos inquisidores.

Así las cosas en nuestras sociedad todo tiene el mismo valor, según Robert Spaemann “El precio que exige el pluralismo total es demasiado elevado. Destruiría cualquier cultura desarrollada y haría imposible la convivencia de los hombres”. y que quede constancia que no comulgo con este filosofo alemán.

La democracia que conocemos se basa en el respeto de las opiniones de las minorías, pero también, y sobre todo, en el gobierno de las mayorías. Ahora, sin embargo, se nos pretende convencer de lo contrario, pues son las minorías, desde la perspectiva del igualitarismo absoluto, las que acaban imponiendo sus criterios y opiniones sobre los de las mayorías, esto claro con una visión mercantilista.

Hay verdades que no dependen del valor subjetivo que les demos y que serán verdades siempre y a pesar de los nuevos inquisidores, la verdad es la verdad, dígala un magnate o dígala un obrero.

Una respuesta

  1. Entiendo que deseen expresarse, pero no debieron tomar las ideas originales de los hnos. Flores Magón y mucho menos para un partido político.

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